Tod@s sabeis y estais enterados de un tipo de técnica terapéutica "especial" denominada Terapia Asistida con Animales. La misma trata de realizar sesiones estandarizadas de terapia cognitiva, física y social con cualquier tipo de colectivo que pueda sacar beneficio de la misma y el animal más que nada es una herramienta de trabajo diferente a otra que podemos usar. Se pueden usar desde perros hasta focas, pasando por caballos, pajaritos, peces, conejitos, gallinas y cualquier animal al que se le pueda
entrenar para ello, y recalco entrenar ya que no nos sirve cualquier animal, sino que después de seleccionarlo minuciosamente buscando qué pretendemos sacar de él, tenemos que valorar si es adecuado tanto física como socialmente, pues de nada nos sirve por ejemplo un caballo arisco, o demasiado alto, y después de todo ello se le tiene que pasar por un proceso llamado entrenamiento, pues el animal tiene que saber realizar ciertas tareas de "circo" para que nos pueda servir de colaborador en la terapia (reconocer colores, números, obedecer órdenes muy complejas, dejarse hacer por cualquiera, etc).
Pero yo no quería hablar de ello. Lo que yo pretendía remarcar en este post es el BENEFICIO que trae consigo, ya de por sí mismo, el animal con la persona. Ese vículo amistoso, de amor sin condiciones. Está claro que no se le puede llamar "terapia" al hecho de que el vínculo generado entre animal y persona ya viene desde nuestros ancestros. Por ejemplo el perro, que no abandona a su dueño. Pero ¿¿¿porqué no considerarlo terapéutico??? No está medido, ni es estandarizado, ni se puede evaluar pero la sonrisa que saca un animalito a cualquier persona, tenerlo en brazos, acariciarlo...... es beneficioso porque: relaja cuerpo y mente, estimula vista, tacto, oído y olfato, mejora la autoestima, se trabaja la propiocepción, se trabaja el aquí y ahora, se puede estimular la reminiscencia... y un largo etc.
Así pues termino animando a que se usen animalitos en alguna sesión. Buscando qué beneficio se puede sacar de ellos, según el animal y que, aunque no estén entrenados, aunque no sean animales de terapia, vereis que podeis sacar mucho jugo en sólo una hora. Imaginaros si las visistas se repiten.....
